27 Problemas que solo entenderás si eras una niña fresa en los dosmiles

    Ugh, ¿dónde está mi bolsa Louis Vuitton falsa?

    1. Pocas cosas eran tan nefastas como cuando tus botitas de peluche se mojaban con la lluvia o con los charcos.

    2. ¿Y si te querías dejar dos churritos enfrente de tu peinado pero la altura de tu pelo no te lo permitía?

    3. Y qué tal cuando pisabas tu falda larga y se te bajaba hasta abajo de las pompas.

    Lol.

    4. Era terrible saber que se aproximaba alguna venta o estreno de Harry Potter y tú no sabías dónde habías dejado la bufanda de tu "casa" favorita.

    5. Al principio, cuando no tenías tus propias corbatas, tenías que pedírselas a tus papás y a tus hermanos.

    6. Y, probablemente, la única forma que tenías de comprar una de estas, era en el tianguis.

    7. Si tu amiga no era muy hábil para plancharte el pelo, la quemada en la frente podía llegar a ser EXTRA dolorosa.

    8. Era tristísimo cuando tu poncho tejido se atoraba con algo y empezaba a deshacerse.

    9. Luego te daba por ponerte tus gorritas de camionero todo el tiempo y acababan oliendo horrible.

    10. Que tu crush se conectara en ICQ y no te saludara.

    11. Era devastador no poder comprar todo el merch de las Spice Girls porque solo lo vendían fuera :(

    12. Tus noches de gala se destruían cuando no podías encontrar tu dona/peluquín del tono de tu pelo.

    13. A ver, di la verdad. ¿Tenías una pulsera de Livestrong para la que nunca donaste?

    14. ¿Qué hacer cuando se te acababan las ligas de colores y ya no tenías como pimpear tus brackets?

    15. Si se aproximaba un viaje a la playa y tú no encontrabas tu collar de pukas, entrabas en un ataque de pánico...

    16. Problema era tener el cuerpo de una niña normal, con lonjitas, y tener que usar las faldas y los jeans más a la cadera de la historia.

    Un poquito más abajo y... tu papá no te hubiera dejado salir de la casa.

    17. ¿Te pusiste uno de estos en un lugar cálido?

    18. No había dolor más grande que el de tu pelo enredado en una de estas mentadas diademitas.

    19. Bueno, tal vez cuando una pinche ~cuca~ te arrancaba un pelito.

    20. Seguro te pasó que te quitaste las cejas de más y tenías que esperar meses a que regresaran a su versión original.

    21. Nada como el sufrimiento de un manicure francés descarapelado.

    Y entonces recurrías al Liquid Paper.

    22. Estas pulseritas eran expertas en arrancarte los vellitos del brazo, uno por uno.

    23. Problemón cuando todas tus camisas de vaquera se estaban lavando...

    24. ¿Qué tal lo triste que era cuando tu anillo de humor se perdía o dejaba de funcionar?

    25. Era demasiado fácil perder uno de estos anillos/relojes.

    26. Qué desesperante era no encontrar el estilo adecuado para tu perfil en MySpace...

    27. Pero no tanto como no encontrar tu camiseta de encaje que iba CON TODO.

    ¿Quieres recibir contenidos para sentirte cada vez mejor contigo? ¡Suscríbete a nuestro newsletter de Estilo y Bienestar!



    Si no puedes ver la casilla anterior, suscríbete aquí.