El espacio es demasiado pequeño.
La cama no es tan sólida como parece.
La almohada y el colchón son demasiado delgados.
O el baño tiene alguna pérdida.
El cuarto está en un entrepiso y el baño… ¡abajo!
La piscina es muy pequeña.
Queda demasiado lejos de la playa. O de cualquier lado.
Faltan utensilios básicos de cocina.
Estás muy pegado a tus vecinos.
El cuarto no tiene cortinas.
El refrigerador es muy pequeño.
No hay lugar para guardar la ropa.
Hay un solo toma coriente.